viernes, 11 de septiembre de 2015

Plaquetas




Trobocitopoyesis: Las plaquetas son fragmentos citoplasmáticos de una célula especializada o megacariocito.  A medida que la célula va envejeciendo, su núcleo va haciéndose cada vez más poliploide, hasta el punto que el megacariocito formador de  plaqueta puede llegar a tener un número de cromosomas 64 veces superior al normal. Los fragmentos del citoplasma del megacariocito formador de plaqueta dan lugar a la liberación de las plaquetas. En la vida embrionaria, los megacariocitos se hallan en la mayor parte de los tejidos hematopoyéticos, pero en el adulto se supone que la producción plaquetaria se desarrolla principalmente en la médula ósea.

Megacarioblasto.

Tamaño: De 25 a 36 μ.
Núcleo: Redondo u oval. Grande, con cromatina delicada que se tiñe de color púrpura y escasa paracromatina.
Nucleólo:  De 2 a 6 pequeños y mal delimitados.
Citoplasma: Escaso basófilo o irregularmente basófilo, a veces con extrusiones citoplasmáticas.

Sitio de localización: Médula ósea. 










Promegacariocito.
Tamaño: de 25 a 50 μ
Núcleo: grande e irregular, más tosco que el del megacarioblasto. Puede parecer lobulado. A veces existen dos o más núcleos diferenciados.
Nucleólos: son difíciles de ver y hay de ninguno a dos.
Citoplasma: moderadamente basófilo con cierta policromasia. Contiene unos cuantos gránulos azurófilos finos en la zona perinuclear. En algunas circunstancias se produce una formación precoz de plaquetas en la periferia. 



Megacariocito.
Se trata de la mayor de las células sanguíneas. Varía tanto su aspecto que resulta difícil describir una sola forma típica. Se deben distinguir estas células de los osteoclastos. El tamaño de la célula varía según el número de lóbulos presentes.
Tamaño: De 40 a 100 μ.
Núcleo: multiforme pleomórfico. Generalmente parece un cálculo coraliforme; la cromatina es tosca e irregularmente acumulada. 2 – 16 lóbulos (8 más común).
Nucleólo: Ninguno o muchos, casi siempre invisibles. Sin embargo, en células aisladas cabe observar muchos nucleólos pequeños que son un reflejo de las divisiones endomitóticas poliploides del núcleo.
Citoplasma: Abundante, pálido con gránulos azurófilos finos que se destribuyen de forma regular y dispersa, o en acúmulos. Puede presentar proyecciones citoplasmáticas parecidas a seudópodos que originan las plauqetas.
Ralación núcleo/Citoplasma: Variable.
Intervalo de referencia: Médula ósea: 5 – 10 con objetivo 10x (aumento de 100x). 1 -2 con objetivo 50x (500x). Sangre periférica: 0%


Plaquetas.
Tamaño: De 2 – 4 μm.
Núcleo:  No posee.
Nucleólo: No posee.
Citoplasma celeste a incoloro. Gránulos rojo a violeta.
Relación núcleo/citoplasma: No posee.
Intervalo de referencia:   No corresponden a médula ósea.  En sangre periférica se encuentran entre 7 – 25 con objetivo de inmersión en aceite 100x. 






Bibliografía.
Miale, B.F. (1985). Hematología. Medicina de Laboratorio. 6ª edición. México. Editorial Reverté S.A. 
Rodak, B.F. y Carr, J.H. (2010). Atlas de Hematología clínica. 3ª. Edición. Argentina. Editorial Médica Panamericana S.A.
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